Gratitud es la palabra que resume mi sentimiento de apreciación a nuestra Cofundadora y nuestros primeros voluntarios por haber sentado las bases de nuestro programa. Yo también me reí cuando escuché acerca del episodio en el que Lois W. lanzó un zapato. Esto es porque sabía que, de haber sido Lois, yo le hubiese lanzado un objeto más considerable a mi esposo. Su historia me llevó a más reuniones y a un mayor estudio de los Tres Legados con una Madrina muy paciente.

Abrir mi mente a los Pasos no fue algo fácil para mí. Resentía la frase «defectos de carácter» en el Sexto Paso. Esto me hacía sentir como si fuera a estar rota permanentemente. También me preguntaba por qué el Décimo Paso no me daba permiso para decirles a otros que yo tenía razón. Había estado toda una vida equivocándome o arrepintiéndome por algo. Los miembros y las reuniones me ayudaron a concentrarme en el Primer Paso y en el principio de aceptación, y a soltar las riendas de los demás Pasos. Cuando me asenté en el programa tal y como es, me abrí a la posibilidad de cambiarme a mí misma.

Más adelante, quería retribuirle a mi primer grupo base. Me ofrecí como voluntaria para hacer pedidos de la literatura y así leer más de esta. Cuando me convertí en Representante de Grupo, descubrí que Al‑Anon no es un accidente, sino que tiene una estructura. Nuestras Doce Tradiciones son un ancla para nuestros grupos y ramas de servicio. Además, me gustaba la idea de la autonomía en la Cuarta Tradición porque yo era rebelde. Mi Madrina me alentó a leerla completamente, lo cual me ayudó a pensar acerca de las acciones de nuestro grupo. La historia de Al‑Anon me ayudó a comprender que nuestras Tradiciones están fundamentadas en las experiencias de los miembros de Alcohólicos Anónimos. Ellos ayudaron a los grupos de Al‑Anon a evitar dificultades y controversias dentro y fuera de la hermandad. Disfruto leer los capítulos «Historia de los conceptos» e «Introducción» de la sección «Los Doce Conceptos de Servicio de Al‑Anon» del Manual de Servicio de Al‑Anon y Alateen (SP‑24/27). También están basados en las experiencias pasadas y afirman el espíritu democrático de nuestra hermandad.

Utilizo la historia de Al‑Anon como una GPS (Guía Poderosa de Sabiduría) para mi viaje de recuperación. Hay lecciones valiosas tanto en mi pasado como en la historia de Al‑Anon. Me dan un camino a seguir y me ayudan tanto a mí como a la hermandad a continuar viajando de manera segura a través del tiempo.

Por Claire R., Directora Adjunta de Difusión Pública‑Profesionales

The Forum, marzo de 2020