Mi esposo y yo habíamos asistido a consejería familiar y espiritual, y nos dijeron que yo tenía que ir a Al‑Anon y que él necesitaba asistir a Alcohólicos Anónimos. Por supuesto, pensé que el problema era todo suyo y que, si tan solo él dejara de beber, no estaríamos en esta situación. Mi esposo había entrado y salido de Alcohólicos Anónimos, y me pidió que intentara asistir a Al‑Anon. Pero dije que no. «¡Simplemente deja de beber!»
Le pidió prestada alguna literatura a un vecino para que yo la leyera. Se la devolví inmediatamente. Sin embargo, encontré el folleto Alcoholismo, un carrusel llamado negación (SP-3) tirado sobre el escritorio, y finalmente decidí leerlo. La sección sobre el papel de los miembros de la familia en la enfermedad me sacó de mi negación y se sembró una semilla para la posibilidad de asistir a Al‑Anon.
Poco después de esto, mi esposo fue acusado por el delito de conducir en estado de embriaguez y, en lugar de ir a la cárcel, eligió asistir a consejería familiar a través del centro de recuperación local. No tuve más remedio que ir a terapia con él. La asignación del consejero para nosotros fue (nuevamente) que él asistiera a Alcohólicos Anónimos y yo asistiera a Al‑Anon. Esa noche había reuniones. Finalmente, me sentía lo suficientemente abatida como para estar dispuesta a aceptar el regalo de la desesperación.
Cuando entré por la puerta de esa reunión, supe que esas personas tenían algo que yo quería y necesitaba. Escuché que yo no causé que mi esposo bebiera, que no podía controlarlo y no podía curarlo. También escuché el lema «Sigue viniendo». Me dijeron que está bien amar a un alcohólico y no amar sus acciones. Necesitaba desesperadamente escuchar eso.
La lectura del 4 de mayo en Un día a la vez en Al‑Anon (SB-6) dice: «En cierto sentido, todo lo que me sucede es un don de Dios… pueden ser dones instructivos». No pude ver eso hasta que acepté el regalo de la desesperación esa primera noche. Entonces me di cuenta de que había muchos otros regalos esperándome.
Por Joyce Y., Texas
The Forum, diciembre de 2023
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