Hoy tuvimos nuestra reunión de grupo de Alateen, y tengo que decirles que me siento muy agradecida por Alateen. Este programa ha producido un cambio increíble en la vida de estos estudiantes. Muchos de ellos compartieron sobre la forma en que ahora se están llevando mejor con sus familiares —tanto con los miembros de la familia que beben como con los que no beben—. Muchas veces escucho decir que este es el lugar seguro que ellos tienen en su vida, para poder compartir todo lo que tienen en la mente, donde los demás no los juzgarán, no comentarán, ni se enojarán.
Es asombroso ver la transformación de estos estudiantes. Los veo pasar de adolescentes abatidos, enojados y desesperanzados —tratando de lidiar con el alcoholismo en la familia— a sentir y encontrar poco a poco paz, esperanza y fortaleza de los demás, a amarse el uno al otro y a ser felices. Eso me encanta. Les da a ellos la seguridad y la esperanza que una orientadora no les puede transmitir. Es un proceso de grupo y un proceso inspirado, y tener esta oportunidad en la escuela es increíble, ya que en su mayor parte estos muchachos no podrían llegar a una reunión nocturna en la comunidad. La vida en sus hogares con sus familiares alcohólicos es tal que no podrían obtener transporte en la noche ni sentirse libres de hacerlo.
Alateen les brinda apoyo, es seguro y estable. Los muchachos de familias alcohólicas no conocen la estabilidad, pero en Alateen aprenden a confiar. Alateen influye en su perspectiva, en su autoestima, en sus calificaciones escolares, en sus relaciones con amigos y familiares, en su confianza, en su capacidad para mostrar preocupación por los demás, en su paciencia, en su tranquilidad —en tantas cosas que probablemente no puedan obtener en ningún otro lugar—.
Los estudiantes preguntan si Alateen estará en su próxima escuela cuando se mudan a otro lugar o cuando van a la secundaria. Eso es una red de seguridad para ellos. Ellos cuentan con la misma, y me siento muy agradecida de que hayamos podido lograr que Alateen esté en tantas otras escuelas.
Aprecio mucho a los Padrinos de Grupo de Alateen que están fielmente aquí todas las semanas. Los miembros de Alateen los aman. Siento una enorme gratitud por el programa de Alateen. Conozco sin duda los cambios que el programa ha realizado en la vida de estos muchachos —cambios e instrumentos que permanecerán con ellos e influirán en su vida entera—.
Gail Barker, LCPC, Orientadora escolar
Al-Anon se enfrenta al alcoholismo 2016